El 28 de abril se conmemora el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo y en USTEA seguimos luchando para que:
+ Se dote a las Unidades de Prevención de Riesgos Laborales con el número establecido en la Ley de PRL de 1995. Actualmente no se cubre ni el 20% del total que corresponde por el número de personas que forman la plantilla docente. Señalar que este proceso donde la Justicia ya nos dio la razón parece que va a forzar a la Consejería a un aumento muy significativo de dicha dotación para el curso 2024-25.
+ Se apueste por campañas que visibilicen el problema tabú del acoso laboral en los centros docentes. Facilitando los pasos a seguir para su detección y denuncia.
+ Se visibilicen las carencias en infraestructuras y corregir:
- La existencia aún de centros con amianto a pesar del Acuerdo del 5 de julio de 2016, del Consejo de Gobierno, por el que se aprobó la planificación de la retirada progresiva del amianto en las infraestructuras públicas educativas antes del finalizar el 2022.
- La permanencia de muchas aulas en módulos prefabricados mientras se cierran aulas en centros públicos. En la anterior legislatura el Consejero se comprometió a eliminarlas y a fecha de hoy a decenas, muchas de ellas con más de 10 años de antigüedad.
+ Se dote de presupuesto y se desarrolle en la totalidad de centros la Ley andaluza 1/2020, de 13 de julio, la Ley de Bioclimatización, que tiene por finalidad la mejora de las condiciones térmicas y ambientales de los centros educativos públicos andaluces, mediante la aplicación de técnicas bioclimáticas y el uso de energías renovables.
+ Exigimos fondos para una conservación adecuada de las instalaciones escolares. Muchas de ellas obsoletas y con un muy deficiente mantenimiento
+ Denunciamos y exigimos el cumplimiento de la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de prevención de Riesgos Laborales, (artículo 22) , donde viene establecido que el empresario garantizará a los trabajadores la vigilancia periódica de su estado de salud en función de los riesgos inherentes al puesto de trabajo que ocupen. La Consejería sólo realizó una media de 5,42% de los reconocimientos médicos al personal docente el curso pasado.
+ Luchamos por un aumento significativo de las plantillas docentes que permita el cuidado de la salud mental del profesorado, al reducir la carga burocrática que conllevaría la bajada de la ratio máxima en las aulas y la reducción del horario lectivo del profesorado.
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